Køpi es el nombre de un centro cultural ubicado en el barrio de Kreuzberg con una gran historia, ya que funciona desde hace unos 30 años, cuando esta zona era “pobre” y ningún Berlinés quería vivir aquí.
Esle lugar fue uno de los primeros, dentro del movimiento okupa de los 90, que llegó a tener unas 160 casas okupadas hasta que el gobierno decidió regular esta particular actividad. Realmente en Berlín no existen verdaderas casas okupas, ya que tienen algún tipo de contrato de alquiler supervisado por el Ayuntamiento. Entrar en las viviendas vacías, arreglarlas y llegar a un acuerdo con el propietario, es una práctica denominada instandbesetzen, que se legalizó a partir de de la década de 1990.
A medida que los berlineses e inmigrantes prosperaron, esta zona de la ciudad se ha vuelto cada vez más cara y por supuesto, los intereses inmobiliarios han ido prevaleciendo, a pesar de una encarnizada lucha de los movimientos okupas. Hoy en día, esa pelea ya casi no existe y son muy pocos los lugares que contiúan el legado de los viejos okupantes. De hecho, algunos históricos como Tacheles ha sido cerrado y sus okupantes han tenido que buscar un alquiler o volver a casa de sus padres…
Posiblemente uno de los pocos lugares que resisten, con algo de fiereza la avanzada hispter sea Liebig34. un “proyecto anarcofeminista y casa social”, en lo que fue un edificio okupado en Friedrichshain. Pero si no entran en el “target” esperado, no les recomiendo asomar su cuerpecito por allí.
Køpi hoy
Hoy es el 2019, y Kopi sigue siendo un lugar interesante para estar. Seguramente el ambiente ya no tiene el peligro de lo 80, y poco queda de la resistencia de los 90, pero no esta nada mal para ver alguna película rara y tomarse una cerveza, mientras intentas que tu cara de turista no sea tan obvia.
Además si te gusta el punk rock, es uno de los pocos sitios donde todavía se pueden ver grupos en directo. Hay un festival muy interesante. Además funciona como lugar de entrenamiento de circo, gimnasio de boxeo, restaurante y tiendas raras. Todavía quedan “residentes” permanentes, que forma una mezcla de artistas, desplazados, homeless, refugiados de alguna cosa y algún que otro viajero que ha quedado perdido por aquí.
Para nosotros los viajeros, lo que tenemos que haces es entrar a su web y ver que hay. Realmente lo actualizan diariamente y hay de todo.
[…] Centro cultural Køpi […]
¿Por qué no “recomiendas asomar el cuerpecito” por Liebig34? Yo he ido un par de veces, soy una tía “normal” en cuanto a mis pintas, no llevo ninguna estética que me identifique con “el target esperado” (¿cuál es ese “target esperado” al que te refieres, por cierto?) y nunca me ha pasado nada, al contrario, he podido participar en las actividades y conozco a algunas personas del espacio. Supongo que como resisten a la gentrificación y a la invasión turística que tanto os gusta, recomendáis a la gente “no asomar el cuerpecito”. Joder, habláis de la “arremetida hipster” pero parecéis parte de ella.
WIR BLEIBEN ALLE!!
Alle Hipster raus von Kreuzberg!!
Hola, gracias por el aporte!. Seguramente yo no encajaba tanto, siendo turista y hombre. Pero ya nos pasaremos de nuevo por este lugar, quizas llegamos en un mal momento.