Desde la calle Kreuzberg, se entra en una habitación luminosa y cálida con paredes de color salmón, un gran contraste con la mayoría de los restaurantes oscuros y melancólicos de esta zona.
Otra habitación en la parte de atrás brilla en un alegre amarillo. Retratos en blanco y negro sin marco de mujeres africanas sonrientes salpican las paredes: fotos de cafeteras ruandesas que se asocian con Happa para suministrar sus (bastante deliciosos) granos, cultivados y producidos completamente por mujeres.
Todo es un presagio del enfoque personal e íntimo que adopta este restaurante amigable y de mentalidad sostenible. La clientela de la cena es en su mayoría alemana, y un poco mayor. Están aquí para participar de la cocina orgánica y de bajo desperdicio de la chef Sophia Hoffmann.
La comida completamente vegana es muy casera alpina bávara, con muchos platos adaptados de recetas familiares: espere platos reconfortantes como rollitos de col con legumbres locales y strudel de manzana de mamá con salsa de vainilla en el menú de cena de cinco platos, que cambia una vez por temporada.
Elija el maridaje de bebidas; Es una ganga a 26 € (28 $) tanto para opciones alcohólicas como no alcohólicas.
Experiencias
Si eres fan de la cocina vegana, sólo tienes que echarle un vistazo aquí. Los operadores y su equipo de chicas son muy auténticos con su concepto general. Promete tener éxito en este difícil género gastronómico.
Almuerzo: la comida en este restaurante vegano es muy rica, ¡especialmente el pastel de zanahoria con glaseado de tahini fue un poema! El servicio es muy amable, usted ordena y paga al frente y luego la comida se lleva a la mesa.
La camarera fue muy atenta e inmediatamente bajó la música en la zona trasera cuando notó que me molestaba. El interior del restaurante es muy sencillo. La atención se centra claramente en alimentos de alta calidad, sabrosos y asequibles. En general, muy recomendable.
+INFO
- Schlesische Str. 35A, 10997 Berlin, Alemania
- WEB
- +493075438944
- 4.7 en GOOGLE
- 4.5 en TRIPADVISOR
